Historia del Punk

|    Textos    |     Poesía     |     Arte Callejero    |     Documentales    |    Videos Ácratas    |

ACTIVISMO: LO QUE DEBES SABER.

ACTIVISMO: LO QUE DEBES SABER.
LA CRISIS NOS INVADE
El temor es verdadero cuando los inversionistas mediante cuestionables análisis recomiendan a los mercados subir los precios, abaratar las acciones y derrumbar cualquier intento de organización sindical como mecanismos o protocolos para mantener el orden económico en medio de ésta astuta crisis. Es ahí donde nuestros recursos naturales tienden a rematarse y nuestras tierras sufren el abarrote del más fuerte por las impagables deudas que de antemano fueron compradas por los bancos en lo que llamamos: el período de estimulación enconómica.¿Alguien dijo Crisis?
GRECIA EXPLOTA
Las explosiones en Europa están a la orden del día y al parecer muchos son los animados a comunicar sus ideales mediante estos medios. La Comunidad Europea los ha llamado Anarquistas y ellos mismos se han definido como tal. Aún no se logra esclarecer con certeza la razón del levantamiento, al menos, no la razón central. Sin embargo, es entendible que la organización por realizar tales actividades "al margen de la ley" responden al período de crisis "fabricada" por las transnacionales para poner fin a los sindicatos de ese país y a sus industrias.
.
LOS TEMIBLES WIKILEAKS"
Después de mucho tiempo, no se reportó ninguna noticia de tanta trascendencia política como los informes filtrados por Wikileaks. Informes que a la Cía le han dado más de un dolor de cabeza. Pero, ¿será cierto que las verdades más ocultas están citadas en esos informes? ¿será posible encontrar quién asesinó a Jhon F. Kennedy,? ó ¿dónde encontrar las temibles armas de destrucción masiva? ó ¿quién realmente produjo el atentado de las torres gemelas?; desde luego que no, ellos solo muestran lo que nosotros queremos oír.

NUESTROS BLOGS

RADIO PUNK

RADIO PUNK Y CONTRACULTURA - HUMANARKIA
Para escuchar, Haz Click Aquí.

TEXTOS DE HUMANARKIA

Si deseas leer más textos,  te ofrecemos un compilado de nuestros Centros de Contrainformación.

INTRODUCCION A LA ANARQUIA

¿Qué somos?, somos agentes que formamos parte dentro de una etapa de cambios, articulándolos y asumiendo de manera constante sus consecuencias; es decir, definimos de forma constructiva o destructiva los caminos de la historia.

Esa misma historia que siempre tiene para nosotros un mismo final, ese final que muchas veces nos hemos contenido, en la que hemos tratado de avanzar, en la que nos hemos frustrado conforme fuimos creciendo y adquiriendo la conciencia de que “algo” está mal.

Esa conciencia que hinca, esa conciencia que nos daña y que algunos prefieren ignorar. Esa conciencia que solo causa dolor y que arrastramos en nuestras reneganzas; esas reneganzas que solo producen odio y nos estancan en la búsqueda de encontrar cosas que llenen ese vacío tan generalizado, ese mismo odio que hemos almacenado en vez de desplegar.

Y toda esa decepción a lo largo de la vida produce resignación, una suerte de renuncia a nuestros propósitos porque construimos una existencia arrastrando el peso de esas piedras que bien pueden ser de una vez lanzadas a quienes destruyen el mañana. Porque la anarquía no es arrastrar el odio sino asumirlo y lo asumimos con propuestas, con ideas, no con excusas y vacilaciones producto de la ociosidad filosófica y de la escases de la acción directa. Acciones sinceras que reviertan ese triste final que tanto le reclamas a tus verdugos, los mismos que se llenan sus bolsillos con tu pasividad.

I. LA ANARQUIA COMO DECISION

Y llegamos a éste año, en este preciso momento de decisiones que pueden ser el inicio hacia algo novedoso que le otorgue relevancia a nuestras vidas porque no es el dinero, ni la familia, ni las propiedades lo que otorgue la razón de ser del individuo. El mundo del ahora nos ha enseñado a aferrarnos a las vanidades, la sociedad del consumo aparentemente libre y democrática predica que la bondad, la normalidad y el buen juicio radica en esos principios.

Pues llegó la hora de decidir por nosotros mismos sobre el rol que asumiremos, si queremos ser las tuercas que alimenten la mega-máquina industrial y belicista del ahora ó la de hallar dentro de una intelectualidad honesta los elementos que contraríen el transcurso de la historia para empezar a construir la anti-historia: el mañana.

Empecemos definiendo que es lo que realmente defiende el capitalismo. El capitalismo es todo lo que vemos y tocamos, de manera que es justicia filosófica decir que todo lo que existe tiene un precio. Nuestras vidas, el agua, la tierra, los sentimientos son monetariamente apreciables.

El capital es el dios moderno, el mismo que necesita reestructurarse para no perder vigencia, contener guerras para no perder poder, acrecentar la pobreza para no perder dominio de manera que condicione y se perpetúe en las naciones que ven en él a su inevitable salvador de las crisis financieras, de los bloques fabricados, de las ideologías creadas y comúnmente representadas por tirarnos contratados que le harán perder altura moral en sus luchas para satanizar las dignidades sociales, todo ello para tener el derecho de intervenir en nuestras vidas con sus nebulosas recetas económicas y contratos transnacionales firmados a puertas cerradas.

Es la mafia universal de quienes han creado el dinero a partir de inútiles pedazos de papel impreso que la sociedad le ha implantado valor. Y por cuanto somos dependientes a sus tratados, a sus productos; hemos olvidado el sentido de la vida y de la libertad al punto de materializarla. Confundimos con la ambición instruida todo concepto de progreso asumiendo que ello implica apoyar el genocidio y el ecocidio en merced de la explotación de nuestros cuerpos y de la madre tierra. En pocas palabras, el capitalismo nace de tu indiferencia hacia el mañana.

Pero existen la tecnología, la modernidad y la ciencia que en conjunto hacen todo más sencillo. Es nuestra noción abstracta de que estamos construyendo una sociedad justa y equilibrada a partir de la explotación de mujeres y niños que son usados en medio oriente para fabricar esas herramientas que te alienizan.


¡Pero mira que bien oculto se encuentra todo eso!. Porque la tarea de encontrar apariencias a la “mierda” es sencillo; en resumen, para ello existen los medios masivos de comunicación, las grandes cadenas que desinforman en todos los sentidos a la población a fin de sujetarla a su opio, a la sumisión, a la carencia de ideas.

II. EL PODER CORROMPE, PERO NO TANTO COMO EL CONOCIMIENTO.

Cuando poseemos la inteligencia del “saber”, existe el gran riesgo de sentirnos como dueños de la verdad absoluta; nuestros planteamientos son rígidos, dogmáticos, venidos de una casta revolucionaria intransigente y orgullosa de sus fracasos.

Nuestra vasta experiencia deviene de la acumulación de perspectivas y avanzamos en el proceso de la podredumbre como personajes que hemos probado lo duro de la realidad y a la que juramos con simple juicio, el no rebelarnos contra ella por ser inevitable.

El efecto “distroy” que consecuentemente tumba a las mentes sin expectativas y sin definiciones claras para entender que la anarquía no simboliza el desinterés hacia el mañana; si no por el contrario, es una seria propuesta de inconformidad a lo que existe en el ahora. Esa es una muestra exacta de su irreverencia; Por lo tanto, el ideal ácrata no está pensado en el candado de una acción imposible, sino en el tónico de un pensamiento exigente. ¿De qué manera combates tu inconformidad?

Sin embargo, en el mundo del ahora existen aquellos que son seducidos por el conocimiento, difieren mucho de las ideas del resto al considerarse como iluminados o dioses de la lucha social, aunque lo social vistosamente pretende ocultar la intención egocéntrica de acaudillar las sociedades para implantar ciertas ideologías. Para el mundo, las ideologías le son innecesarias. Las tenemos de todos los tipos, tamaños y se alimentan de la distensión social de los pueblos o grupos humanos que las engendran.

Nos podemos llenar la boca de palabras pero las palabras no lo son todo. A lo largo de nuestra vida han existido instituciones que nos han formado para cubrir ciertos requisitos convivenciales; como es el caso de todo ese bombardeo ideológico venido de las religiones, del seno familiar, de las escuelas y otras instituciones, que han ido fundando perspectivas en nosotros.

Esas perspectivas son variadas y desde luego, cuando fuimos niños nos hemos preguntado cosas encontrando como respuesta: la represión. El cuestionamiento en el mundo de hoy no forma parte de esas perspectivas, no desde el punto de vista curricular, mucho menos de los sermones pastorales. La tarea en resumen significa acomodarse a lo fundado, al pensamiento único.

Pero no sé si pocos tenemos la oportunidad de dignificar y validar nuestro criterio yendo contra toda esa tiranía mental, cuando ser rebelde no es más que un simple rótulo o una triste promesa juvenil. De ser así, conscientes, es momento de recordar que poseemos solo una vida, es decir, una sola oportunidad en donde podremos acertar o equivocarnos. Un pequeño espacio, un minúsculo momento en la historia alimentada por la “mierda” en donde podremos ser algo más de lo que nos toco vivir, de lo que nos fue permitido, ¡ahí está el desacato!, ¡ahí está la anarquía!.

III. EL CUESTIONAMIENTO ES EL INICIO DE LA LIBERACION
Desde luego que muchos aguardan el ideal libertario no sin antes haber liberado sus pensamientos de los prejuicios y las normativas implantadas en nuestro “yo”. Es de saber, que la mayoría de las personas confían en el subjetivismo como la herramienta que les ayudará a reclamar esa porción de mentalidad que le ha sido arrebatada por la sociedad en su conjunto.

Definamos que el mundo hostil es una realidad ideológica. Definamos también que el subjetivismo lejos de liberarnos, solo ha constituido un opio, una droga en la cual creamos un sinfín de esquemas mentales, en la que tratamos de ajustar la realidad. Pero, ¿cabe pensar que la realidad debe ser ajustada a nuestras percepciones?, ¿la filosofía política y/o social debe escalar los peldaños del romanticismo para llegar a la verdad?

Existen dos ideas que me son urgentes de aclarar al abordar dicho tema: En principio, hay muchos pensadores que se han adelantado a afirmar que el ideal libertario es un romanticismo puro, habría que concluir que esas opiniones son hechas por defensores de la explotación, intelectuales que en su puro derecho defienden al mismo sistema que les otorga, pero algo es cierto: jamás las necesidades del explotador serán iguales a las del explotado. No puede llamarse romántico a la necesidad humana de rescatar la dignidad, a la desesperación por el alimento, a la reclamación ecologista en contra de la continuación de medidas que ponen en jaque a la naturaleza y sus recursos pertenecientes solo al 3% de la población, aquella casta desquiciada dueña de la banca y del dinero.

Cualquier intento por pincelar al egoísmo y la avaricia como actividades humanas intocables y necesarias, no los exime de ser males que deben ser arrancados. Por el contrario, esa acción probable no parte como un hecho utópico, sino como una necesidad otorgada por el carácter humano en la búsqueda de su evolución.

Secundado lo anterior, es importante distanciar las ideologías y los preceptos de nuestras perspectivas. Obviamente, la neutralidad es un recurso escaso en las personas pero que no ha perdido vigencia. Es dificultoso entender con otros ojos algo que ha sido esquematizado, catalogado, discriminado.

Por lo tanto, no podemos confiarnos en la idea de construir una realidad subjetiva en base a nuestras ideologías o dogmas. Poca observación y mucho razonamiento llevan al error. Mucha observación y poco razonamiento llevan a la verdad. Comparto la idea de que la palabra razonamiento podría sustituirse con provecho por la expresión “dialéctica” en función de una ideología. Es decir, en lugar de aprender de la realidad con todos sus datos y construyendo a partir de ella; se intenta manipular la realidad ajustándola a la coherencia de un esquema prefabricado por la inteligencia de otros.

Tampoco podemos engañarnos negando que todo lo aprendido fue producto de algo que nos han enseñado otros. Pero son pocos los que han reconstruido sus cimientos a partir del cuestionamiento de lo impuesto e incluso, de lo defendido por nosotros mismos cuando no éramos capaces de entender la realidad objetiva.

¿Por qué es fácil arrancar a dios de nuestras vidas? Desde luego porque dios es una simbología a la conservación de las leyes morales que rigen en los grupos humanos. ¿Por qué es tan difícil arrancar a nuestro “yo burgués” de nosotros mismos?, porque esa imagen conceptual fue construida por nosotros mismos para darle satisfacción a nuestra hedonía. No solo basta derrocar los gobiernos materiales ó exteriores sino también a nuestros gobiernos interiores.

continuará...

LA WIKIESTAFA

Últimamente, he leído en muchos medios, el "boom" que se ha desatado por la difusión de documentos e informes aparentemente secretos a través de la conocida Wikileaks. Literalmente, estos informes van desde aburridos análisis e hilarantes investigaciones centrados en las figuras políticas más representativas de la región, hasta albergar enfoques corporativos tan complejos que ponen en jaque a varias industrias, las cuales son propietarias de una fama muy cuestionable en el incierto mundo de los negocios.

Resalto mucho lo abierta que esta la información a las personas en general, pues todos estos textos son concebidos para ser leídos, analizados y estudiados desde un perfil público. En toda esa conglomeración de chismes dudosos, se abordan temas de "interés nacional", lo que conlleva a pensar que ninguna agencia de gobierno está capacitada para resguardar y/o proteger datos de éste tipo y que, democráticamente hablando, todo éste desacato a la privacidad significará el fortalecimiento de nuestra perspectiva que tenemos hacia la libertad de información.

Pero, ¿será acertado compartir esa perspectiva?. Desde luego, como muchos piensan que wikileaks es un claro ejemplo de libertad de expresión, hay otros que manifiestan (y ese es mi caso), que es un anzuelo que los medios gustosamente exponen en sus noticieros para que sea mordido por las personas que comúnmente están a la espera de informarse de los medios que más confianza le otorgan, sin percatarse que ellos solo muestran una porción de la realidad o casi nada de ella debido a que en esos informes (en su gran mayoría maniatados) no se detalla lo que realmente nosotros consideraríamos secreto como: ¿quién produjo el atentado del 11-S?, ¿dónde realmente se encuentra Bin Laden?, ¿cuál fue el destino de las dichosas armas de destrucción masiva? ó ¿qué planes tienen las petroleras para con Medio Oriente?.

Me parece increíble el esfuerzo de los periodistas destacados en las grandes cadenas televisivas por hacernos creer que "¡por fin se destapa la verdad!; nos administran nuestra dosis de información (reciclada desde luego) para hacernos creer que en éste y en otros gobiernos se preocupan por la transparencia en la toma de decisiones.

También me causa desazón que algunos medios con los que compartimos ideas o visiones, se solidaricen con el quien obviamente, después de todo ese escándalo mediático, saldría bien librado (¿ó no, Julian Assange?). Después de todo, nadie garantiza que éste como muchos otros no sean los tan famosos "idiotas útiles" que se utilizan para facilitar una manipulación de estas características.

Finalmente, habría que determinar que las auténticas verdades no están plasmadas en documentos de la Casa Blanca o en el computador de algún desubicado agente del servicio de inteligencia; por lo tanto, no habría razón para darle tanta credibilidad e importancia al "juego de espionaje" que se ha fabricado en estos medios masivos.

MEDIOS DE COMUNICACION O MANIPULACION

Los medios de comunicación se han encargado de vendernos posturas, conceptos y mediasverdades ideológicas que no ofrecen soluciones reales a los problemas ya existentes del tipo social, político, económico, etc.

La idea principal a la que nos quieren someter es la de sentirnos libres o al menos, satisfechos de alcanzar sueños materiales basados en el consumo o la apreciación monetaria para conquistar una vida plena y con el objetivo de no sentirnos apartados de ese deseo tan abstracto de progreso y/o superación.

Por ejemplo, se nos pretende mostrar libertad de expresión, cuando la bendita libertad para la televisión y los medios consiste en abordar de manera auspiciosa la temática de lo estúpido y vano, lo inmundo y rapaz; se han encargado muy bien de confrontar y minimizar las luchas sociales y las injusticias que imperan en el marco “democrático” a través de cortina de humo.

Ahora no es necesario reclamar por un salario justo siempre que se tenga en pantalla a un puñado de artistas que hagan gala a su vacía vida de glamour; después de todo, cualquier chisme de farándula aliviará la desazón por el incremento de la tasa de desempleo; un partido de fútbol hará pasar desapercibido cualquier acto de corrupción.

No es que nuestros gobernantes sean brillantes al momento de armar campañas mediáticas, ¡No!; el problema radica en nosotros mismos que con nuestra indiferencia somos parte de la estrategia de dominación de masas; apartando de nuestra vida el sentido de cuestionamiento.

Permitiendo se nos trate como rebaño que se alimenta de la basura televisiva y propagandística de la prensa escrita; víctimas del ataque intelectual de aquellos que gustan de ocultar la verdad en defensa de beneficios económicos, privilegiando intereses que carcomen a la conciencia y a la cultura.

Sometiendo al individuo a un mar de conceptos “esperanzadores”, cuyo significado difiere mucho del entorno en el que vive; acaso, ¿no es traición fomentar la ignorancia?, ya que por ésta misma, somos lo que somos, estamos como estamos; entonces, ¿cómo terminarán pagando por todos los pliegos de mentiras e infamias que han elaborado?.

Al sistema mismo no le conviene perder la sinfonía del engaño, prevalece entonces el apoyo a quienes gozan de su simpatía ideológicay/o partidarista o incluso a quienes no, derechistas o izquierdistas; porque al sistema mismo no le importaría mucho compartirla estructura del poder, pero sí perder el poder.

Y es justamente eso, el poder, lo que nosotros los libertarios queremos destruir. Por lo mismo, hay quienes siempre intentarán engañarnos con reformas, populismo y demagogia; para garantizar el continuismo con el afán de lucrar una y otra vez. Nosotros estamos llamados a romper con eso, “porque se vive en la revolución y no de la revolución”.